El Parc des rives y sus fotos en Deauville
Este banco verde se ha desarrollado respetando el entorno natural a lo largo del río Touques, desde el Pont des Belges hacia el mar. Hay dos recorridos posibles: uno está jalonado por una selección de imágenes de Deauville vistas por los fotógrafos invitados cada año al Festival Planche(s) Contact; el segundo penetra en la vegetación gracias a una pluma de madera de azobé de 99 metros de largo. El paseo puede prolongarse en la otra dirección, cruzando el puente hacia la ciudad de Touques.

La vía verde, a pie, en bicicleta o a caballo entre Deauville y Saint-Arnoult
Los centros urbanos de Saint-Arnoult (acceso cerca de las pistas de tenis) y Deauville (acceso desde el bulevar Mauger) están unidos por una vía verde de algo más de tres kilómetros, accesible a peatones, patinadores, ciclistas y jinetes. El paseo sigue la pista recta del hipódromo de Deauville-La Touques, atraviesa el Parque de Ocio Intercomunal, sigue las orillas del Boucles de la Touques y pasa por detrás del Pôle International du Cheval Longines Deauville. Es una ruta fácil y tranquila, que serpentea entre espacios verdes y árboles, entre caballos, vacas, patos y cisnes.

Los bucles de la Touques y su fauna local en Saint-Arnoult
El río de la Touques*, que tiene su desembocadura en Deauville/Trouville-sur-Mer, fue modificado en los años 1860 para permitir la creación de la línea ferroviaria desde París. Se reguló su caprichoso curso para ahorrar la construcción de un puente, abandonando así este meandro que se había convertido en el "río muerto de la Touques". Las orillas del río, de 1,5 km de longitud, son totalmente peatonales y ofrecen la posibilidad de reponer fuerzas en plena naturaleza. Aquí podrá relajarse en un banco, jugar una partida de petanca o disfrutar de la zona de juegos infantiles. Además de patos y cisnes, los pescadores pueden pescar aquí carpas, ya que la pesca está permitida.

* El Touques es uno de los principales ríos del País de Auge, junto con el Dives. Nace en el departamento de Orne y recorre 108 km antes de desembocar en el Canal, entre Deauville y Trouville-sur-mer.

El parque de San Carlo y sus puentecitos en Villers-sur-Mer
A lo largo de más de 600 metros en las alturas de Villers-sur-Mer, este remanso de verdor, vestigio de la inmensa finca que perteneció a la condesa de Béarn hasta su muerte en 1929, le invita a dar un agradable paseo a la sombra por varios puentecillos que cruzan el arroyo de San Carlo.

El paseo por el torrente del Montcel y su pequeña cascada

en Villers-sur-Mer
Este sendero de dos kilómetros sigue el curso del Montcel hasta el pantano de Blonville-Villers. El paseo puede disfrutarse en compañía de las truchas que aparecen en cada recodo o al pie de una pequeña cascada. Se han añadido dos pequeños puentes de madera para cruzar el arroyo. A ambos lados del sendero, el terreno es hueco a la izquierda y bordea una colina a la derecha. Esta topografía permite que el agua escurra y alimente el arroyo, que a su vez contribuye a la entrada de agua al pantano y su estanque.