La terminal de Deauville-Normandie, la primera de Europa con huella de carbono negativa
Desde principios de abril, los pasajeros de ocio y de negocios que lleguen al aeropuerto de Deauville-Normandie tendrán el placer de descubrir su nueva terminal de bajo consumo energético.
El actual edificio terminal, de 1750 m2, data de 1972 y se diseñó para atender a 35.000 pasajeros al año (en 2022, el aeropuerto atendía a 75.000 personas). El nuevo edificio tiene ahora 3700 m2 y permitirá al aeropuerto..:
acoger a los pasajeros en muy buenas condiciones
La nueva terminal dispone de espacios dedicados y modernizados, así como de una sala de recepción específica para la aviación privada, lo que constituye una ventaja para este aeropuerto. Esta mejora de la asistencia a los pasajeros se ajusta a las normas internacionales de transporte, pasando de un nivel E a un nivel C, el nivel medio de los aeropuertos de Normandía.
enviar un mensaje positivo a las compañías aéreas para el desarrollo de nuevos tráficos
Dos aviones de 186 plazas, más un reactor regional de 100 plazas, pueden ahora ser atendidos al mismo tiempo. Antes, los aviones se retrasaban avión por avión, ya que no podían manipularse simultáneamente.
proseguir su desarrollo racional reduciendo al mismo tiempo su impacto en el medio ambiente
El estudio Jacques Ferrier Architecture ha favorecido la utilización de madera de Normandía y materiales naturales para reducir la huella de carbono de la terminal. Los equipos técnicos también se han diseñado para modularse en función de la actividad comercial estacional, aislando una parte del edificio inactivo, lo que permite una gestión optimizada del consumo de energía.
Este enfoque sostenible se une al proyecto de central fotovoltaica en tierra de 45 hectáreas de EDF Renewables en los terrenos "abandonados" (no utilizados) del aeropuerto, que ocupan más de 200 hectáreas. El aeropuerto de Deauville-Normandie será el primero en acondicionar sus terrenos baldíos a tal escala, en total compatibilidad con su actividad, ya que los paneles de vidrio no serán reverberantes para los pilotos. Se producirán más de 60 megavatios de energía verde al año (el tamaño medio de las centrales fotovoltaicas puestas en servicio en Francia es de 15 megavatios), lo que equivale al consumo anual de 29.000 personas. Se evitarán así unas 700.000 toneladas de CO2 durante toda su vida útil, lo que convierte a la terminal de Deauville-Normandie en una terminal carbono-negativa (que absorbe más CO2 del que emite) y autofinanciable. Su inauguración está prevista para 2024.
Actualmente se están terminando las obras de las zonas administrativas y de llegadas. Estarán listas para recibir a los pasajeros a partir de mediados de abril. La segunda fase de las obras, que incluye la demolición de la antigua zona de llegadas y la construcción de la zona de embarque, está prevista para finales de 2023. Estas obras se financian con la participación de la Región de Normandía (95%) y la Ciudad de Deauville (5%). La Cámara de Comercio e Industria, propietaria del proyecto y gestora del aeropuerto, se encarga de su ejecución. 16 de los 18 lotes de la licitación se adjudicaron a entidades normandas, es decir, más del 55% del presupuesto se inyectó en la economía local.
El jueves 9 de marzo, Hervé Morin, Presidente de la Región de Normandía, Presidente del Syndicat mixte de l'aéroport de Deauville-Normandie, y miembros del Syndicat mixte de l'aéroport de Deauville-Normandie, en presencia de Philippe Augier, Alcalde de Deauville, y Philippe Langlois, Alcalde de Saint-Gatien-des-Bois, visitaron las obras.
