MONTE CANISY
Situado en las alturas de Deauville, en Bénerville-sur-mer, Mont-Canisy ofrece un panorama excepcional, dominando la Côte Fleurie a 110 metros de altura. Durante siglos señorial, Mont-Canisy es hoy un paraje natural protegido por el Conservatoire du littoral y gestionado por el Conseil départemental, que vela por su flora y fauna, pero también un lugar cargado de historia.
El lugar alberga más de 200 especies vegetales, la mayoría mediterráneas o de montaña (enebro, retama de tintorero, etc.), y varias especies protegidas a escala regional (genciana alemana, dompte-venin, raiponce delicada). Reino de las orquídeas, 13 especies florecen también aquí de abril a julio. Entre su fauna destacan tres especies de aves protegidas a escala regional (ruiseñor, locustella moteada, martillo amarillo), varias familias de mariposas y una serpiente protegida a escala nacional (coronella lisa). Con sus estructuras militares y cuevas naturales, el lugar también favorece la presencia de murciélagos.
Su posición estratégica, sobre una colina frente a la bahía del Sena, hizo que se transformara varias veces en una posición de artillería costera: a su vez feudo señorial dividido en 1793, puesto de defensa antisubmarina en 1917-1918, batería costera de 1935 a 1940, luego punto de apoyo artillero más importante del "Muro Atlántico" entre Cherburgo y Le Havre de 1941 a 1944. De este último periodo, casamatas y nichos para cañones de 155 mm, búnkeres, tobrouks, un puesto de dirección de tiro... y una obra subterránea a 15 m, única en más de 150 km de costa, que comprende 250 m de túneles, 25 celdas de cuartel, 25 búnkeres de municiones...
Las pilas del Monte Canisy
La agenda de visitas aquíAlgunas normas de seguridad y "buen comportamiento" a seguir:
El acceso al Monte Canisy es libre. El público puede recorrerlo bajo su propia responsabilidad.
- no se aleje de los senderos existentes: algunas estructuras están semienterradas, enterradas bajo la vegetación, y acercarse a ellas siempre presenta algunos riesgos permanentes.
- cualquier visita a una estructura cuyo acceso no esté debidamente acondicionado es peligrosa: por lo tanto, la realiza con pleno conocimiento de causa y bajo su exclusiva responsabilidad.
- como en cualquier lugar protegido, algunas "prácticas" están prohibidas (acampadas, fuegos, cruces de motos, caza, rotura de botellas, daños a la vegetación, etc.) y en la actualidad son objeto de multas de las que es responsable el vigilante del Conservatorio.
- Evite dejar basura en el suelo que afea el paseo: botellas, papeles, etc.
- si siempre resulta tentador coger flores, traer ramas floridas, tenga en cuenta que, la mayoría de las veces, perecen antes de encontrar un jarrón acogedor: ¡no las masacre!